Esta es una historia sobre una madre y una hija. Sobre Sari (nunca Sara, ¡por favor!), sobre la demencia y lo brillante de la pérdida. Sin lugar para la autocompasión, la hija de Sari registra el momento en que la cabeza de su mamá se desordena y pierde las palabras, mientras arma el relato que ella no dejó de contar y que, a su vez, no pudo contar.
La narradora anota un recuerdo que no le pertenece, una frase divertida, extractos de un diario, una escena del barrio, disparates; los amontona y los pega como un collage, como el collage en el que se transformó su mamá.
¿Por qué son tan lindos los caballos? puede ser: una novela romántica sobre las palabras, un manual de instrucciones para creer en los días, y también la biografía de Sari. En una época donde el duelo es el protagonista de tantos relatos, Julieta Correa nos trae un libro sobre la vida.
Sofía de la Vega