“La invariante temporal” del artista Marcelo Grosman reúne una selección de trabajos realizados a partir de finales de los ochenta hasta la actualidad.
El libro da cuenta de varias reflexiones del artista sobre el uso de la fotografía en el espacio contemporáneo de la imagen. Su producción recorre varios medios, que parte desde la fotografía hasta la utilización de archivos de imágenes. Transita la instalación, el video y múltiples formas de reproducción y captura óptica, contemporáneas y obsoletas.
La imagen en movimiento y el sujeto en movimiento es la síntesis de un ejercicio conceptual inscripto en toda la obra.
El ordenamiento de las mismas lejos de inscribirse en un orden cronológico, da cuenta de diversas exploraciones intelectuales, que giran entorno a la domesticación del cuerpo, las taxonomías sociales, los lenguajes secretos, la iconografía del gesto y los usos de la técnica entre múltiples búsquedas.